DST trabaja en el desarrollo de un campus inalámbrico
Formar y actualizar a la comunidad universitaria en conocimientos tecnológicos y mantenerla conectada a una red inalámbrica, es el norte que orienta los actuales proyectos de la Dirección de Servicios Telemáticos.
Lisbeth Bernal
Departamento de Información y Medios USB
Una de las direcciones que conforma la Secretaría de la USB, Servicios Telemáticos, dedica sus mayores esfuerzos en la construcción de un campus inalámbrico con la finalidad de proveer acceso a Internet desde cualquier área de la universidad, sin la necesidad de usar cables en el proceso de conexión.
Nicola Baglivi, director de la DST, explicó que este proyecto se está desarrollando de manera paralela en ambas sedes de la USB, Sartenejas y Camurí Grande. No obstante, señaló que requiere de una gran inversión, pues sólo en equipamiento se necesita cerca de un millón y medio de dólares.
El proyecto bandera en este período, tal como la ha catalogado Baglivi, ha avanzado con la instalación de equipos que fueron adquiridos con el presupuesto del año pasado. De hecho, estos trabajos comenzaron bajo la dirección del profesor Romelio Carrasquel, quien fue el director de la DST en aquel entonces.
Actualmente, la universidad cuenta con red inalámbrica en Sartenejas que está alrededor del Conjunto de Auditorios, Cafetín El Ampere, Anfiteatro, Edificio de Electrónica (Laboratorio C), Edificio de la Biblioteca, los tres primeros pabellones y parte de la zona donde se ubica la Proveeduría Estudiantil. En la sede del Litoral, la comunidad se puede conectar a esta red desde la plaza cubierta y los cubículos de los profesores.
“Hemos llegado a tener 250 usuarios conectados simultáneamente. El servicio ha sido importante y los estudiantes están contentos y nos piden más, así que estamos comenzando los trabajos en los sitios de concentración de los estudiantes. Queremos cubrir las salas de lectura de todas las carreras cortas y largas, reforzar la Biblioteca y el Edificio de Aulas”.
Otro plan de gran impacto se vincula con la implementación del documento electrónico que realiza el Centro de Archivo y Documento, Cenda, en respuesta al Plan de Gestión diseñado por las autoridades rectorales para el período 2009 – 2013, según el cual se debe “impulsar un mayor uso de procedimientos electrónicos para reducir el consumo de papel en asuntos internos”.
Sin embargo, para Baglivi el proyecto no sólo se trata de la implementación del documento digital, sino también de la firma como instrumento de validación, aunque su puesta en marcha depende de una infraestructura muy costosa, que debe cumplir con las normas ISO 17755, que tienen que ver con los aspectos de seguridad de datos y las instalaciones necesarias para manejar dicho datos.
Según estas normas, comentó, “se requiere de un bunker con paredes de concreto y cinco niveles de seguridad para llegar a los equipos. La inversión, sólo en infraestructura, está cerca de los 800 mil bolívares”.
Los equipos, informó, no solo servirán para la firma digital, sino también para emitir certificados de seguridad de las páginas web de la universidad. Se estima que de contarse con los recursos que exige el proyecto, su implantación se concluirá en tres años.
Abrirán oferta de cursos en línea
El adiestramiento tecnológico de todos los usuarios constituye una meta de la DST que obedece no sólo al cumplimiento de sus principales funciones y el plan de gestión de la institución (eje 4-Universidad innovadora y emprendedora), sino además al cambio cultural que genera el uso del documento electrónico y la firma digital en la gestión universitaria, afirmó el profesor.
“En este trimestre comenzamos un proceso de refrescamiento de los conocimientos de los usuarios en programas que ofrece la plataforma Microsoft como Excel, Power Point, Word y a partir del próximo año comenzaremos con Linux”.
Exactamente, comenzaron 450 cursos en el pasado mes de junio que finalizarán en diciembre 2010. Se espera que en enero se abran otros 400 cursos, aprovechando el convenio entre la USB y Microsoft, aunque a futuro, la DST aspira a diseñar y producir sus propios programas. Con respecto a Linux, la meta se fijó en 200 cursos para ese primer trimestre del año.
De acuerdo a su calendario de actividades, para el próximo mes de septiembre están previstas una jornadas presenciales, que le darán a los usuarios, apoyo y seguimiento a sus clases on line.
La idea, explicó, es trabajar en conjunto con la Dirección de Servicios Multimedia a fin de brindarle a la comunidad las mayores facilidades en el proceso de aprendizaje, de modo que puedan realizar sus ejercicios desde la casa, la oficina o cualquier sitio en donde se encuentren en el tiempo que posean disponible.
El proyecto de adiestramiento será permanente y evolucionará en función de las innovaciones de los sistemas operativos, anunció. “Lo que implica que nosotros como proveedores del servicio estemos bien entrenados”.
Baglivi adelantó que también en septiembre 2010 comenzará un curso para la optimización del uso de la computadora y otro de reparación de PCs, a los cuales podrá asistir la comunidad externa e interna de la USB.
Otros dos cursos pensados en el personal de la universidad, también se llevarán a cabo a partir del próximo trimestre. Uno estará dirigido a los conductores del servicio de transporte uesebista y otro, a los obreros que laboran en el campus con el objetivo de entrenarlos en determinadas herramientas de software que les permitan manejar la computadora y poder realizar consultas a informaciones importante como las registradas por la Dirección de Gestión del Capital Humano, a través de la sección Nómina que se encuentra en la página web.
Se calcula que esta serie de cursos y jornadas, impacte favorablemente en la gestión del Departamento de Atención al Usuario, adscrita a la DST, de manera que los técnicos puedan dedicar sus mayores esfuerzos en atender fallas del equipo y no demandas de los usuarios que surgen por desconocimiento de los programas o mal uso.
Repensamiento de Servicios Telemáticos
Por los momentos, informó Baglivi, no habrá reestructuración, sino repensamiento, es decir, “un estudio de los procesos para su mejoramiento”. La reestructuración más reciente, dijo que ocurrió cuando se incorporó al grupo que lleva hoy por nombre Sección de Formación y Educación.
Junto a esta sección, esta dirección posee otras dos: la de Administración y Compras, y la de Promoción y Difusión. Según la estructura actual, existen además cinco departamentos: Atención al Usuario, Soporte de Operaciones y Sistemas, Tecnología Informática, Telecomunicaciones y Operaciones de Servicios Telemáticos de la Sede del Litoral.
Todas las funciones que debe cumplir la DST, mediante sus diversas unidades, se orientan en una sola misión: “encargarse de los servicios de comunicación de voz y datos, del apoyo técnico en informática no-especializada y de la administración de los servidores de misión crítica de la Universidad”. Conozca más de esta dirección visitando su página: http://www.dst.usb.ve/.
