Venezuela aporta poca información científica sobre cambio climático

Alicia Villamizar

Soraya Villarreal / Departamento de Información y Medios USB.-

A propósito de la reciente publicación de la primera parte del V Informe de la ONU sobre cambio climático, poca ha sido la información científica que ha aportado Venezuela durante el último quinquenio, referida a cambios en los ecosistemas y a las previsiones del gobierno para hacer frente a los efectos del cambio climático en el país.

Alicia Villamizar, profesora del Departamento de Estudios Ambientales de la USB y quien forma parte del grupo de 84 investigadores latinoamericanos que participan en el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (Ipcc por sus siglas en inglés), explica que sobre Venezuela hay muy poca información disponible relacionada con cambio climático, pues cada vez hay menos condiciones para la investigación, y por tanto, menos posibilidades para publicar resultados en revistas indexadas, validados internacionalmente y confiables para el resto de la comunidad científica. Además, la información está dispersa entre las universidades y centros de investigación, es difícil de conseguir y no toda sirve. “Los investigadores trabajan de forma aislada, lo que ocasiona que no haya una imagen integrada de país desde el punto de vista de información científica sobre el tema de cambio climático”.

El gobierno venezolano incorporó el cambio climático en la agenda científica pero no de forma adecuada, explica Villamizar, para quien el tema debe ser transversal a todas las áreas y estar articulado, es decir, el cambio climático no sólo tiene repercusiones en el ambiente y la salud, sino también en la economía, en educación, en manejo de los riesgos, en desarrollo tecnológico,  en seguridad alimentaria, en todos los ámbitos productivos, etc.  Otro aspecto delicado es que “existen dudas y desconfianza sobre los datos generados por el gobierno relacionados con el clima, con las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y en general con sus estadísticas ambientales, pues no hay transparencia ni credibilidad en los datos que éste genera. Lo que sin duda constituye un obstáculo mayúsculo para la investigación del clima y del cambio climático, ya que al no haber – o peor aún, no confiar en- una base de datos a escala país, se hace cuesta arriba generar trabajos con peso científico a menores escalas locales, por ejemplo, que necesariamente requieren apoyarse en grandes bases de datos con cobertura nacional o regional”.

Alicia Villamizar hace referencia al reciente análisis que sobre la ciencia y la tecnología venezolanas realizó Gioconda San Blas, investigadora del Ivic, quien asegura que Venezuela tiene un retraso de 10 años en investigación científica, (http://www.noticias24.com/venezuela/noticia/169303/gioconda-san-blas-venezuela-presenta-10-anos-de-atraso-en-materia-de-investigacion-cientifica-y-tecnologica/). A esta observación Villamizar agrega que en el país se trabaja con las uñas respecto al cambio climático, y que el último inventario de gases de invernadero que hizo Venezuela es del año 1996 con datos de años anteriores. Este inventario, aclara, es un compromiso asumido por los países (conocidos como las Partes) que ratificaron la Convención Marco de las Naciones Unidas en Cambio Climático (Cmnucc 1992), donde se presenta el registro de las mediciones de las principales fuentes nacionales generadoras de GEI, que en Venezuela están representadas, entre otros, por la actividad petrolera, la generación de energía eléctrica, el parque automotor, los botaderos de basura a cielo abierto y la deforestación, emisiones sobre las cuales no hay registros actualizados ni confiables.  “Si no conocemos cuánto emitimos de GEI, no podremos conocer la magnitud del impacto del cambio climático en el país y en consecuencia, no podremos definir las medidas apropiadas para mitigarlo ni adaptarnos”.

Asimismo, todo país adscrito a la Cmnucc debe contar con una oficina que atienda específicamente el tema a través de un punto focal, es decir, un enlace con la convención nombrado por el gobierno, que en Venezuela se maneja entre tres ministerios: para las Relaciones Exteriores, del Ambiente y de Energía y Petróleo. Sin embargo, dice la profesora, no se conoce  el trabajo del punto focal y, menos, su “obligatoria y permanente interacción con los actores claves, como son los sectores productivos privados y gubernamentales, la sociedad, y la propia comunidad científica”. Villamizar, quien desde hace 15 años ha formado parte del Panel de Cambio Climático, como autor contribuyente en varios de sus informes técnicos y globales de evaluación de este problema, no ha tenido contacto con este punto focal.

Otra deuda que tiene el país es la Comunicación Nacional (CN) a la Convención de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, documento que las Partes elaboran, especificando su situación en términos de emisiones GEI, sumideros de carbono, crecimiento de la población, producción por sectores (energía, agricultura, transporte), situación ambiental, y en consecuencia, la identificación de impactos y riesgos, la proposición de medidas de mitigación y adaptación que el país ha tomado o tomará, referidos a aspectos jurídicos, legislativos, económicos, de infraestructura, entre otros, para atender apropiadamente las consecuencias del cambio climático, según las circunstancias país.

Sobre este aspecto la bióloga asevera que mientras algunos países ya han entregado la sexta CN (México, por ejemplo en América Latina) Venezuela apenas entregó en el 2005 la primera CN, “y el gobierno asegura que está trabajando en la segunda CN, pero nadie sabe nada al respecto”. La información que debe reflejar la CN  – que es la situación País-  debe surgir de todas las instituciones públicas y privadas, incluyendo a las universidades y centros de investigación, pues se requiere el aporte de todos, dice Villamizar. “Sin embargo, la convocatoria para ambas CN ha sido casi nula; estamos mal, porque quienes investigan y hacen el trabajo científico, no tienen cómo articularse ni sumar esfuerzos para construir la situación país ante el cambio climático”.

Afectados por el cambio climático

Villamizar  afirma que en Venezuela uno de los principales problemas del cambio climático se evidencia en la pérdida de cobertura de los glaciares de Los Andes venezolanos (los cuales apenas constituyen 0.1% de la cobertura de la cordillera andina).  La pérdida acelerada de los glaciares del país está avalada por investigaciones hechas por científicos de la Universidad de Los Andes (ULA Venezuela),  quienes han estudiado el deshielo de los glaciares de la Sierra Nevada y registrado un retroceso vertical de 9m/año en las últimas cuatro décadas. “Esta situación, que comparte Venezuela con el resto de los países andinos, tal como fue confirmado en el Cuarto Informe del IPCC del año 2007, es preocupante  por cuanto el deshielo aporta agua a todas las áreas que quedan montaña abajo. En particular, el efecto es más evidente para el área agrícola andina del país, donde existe gran preocupación ya que se ha constatado que cada año hay menos agua proveniente de esta fuente natural”.

Alicia Villamizar asegura que existen dudas y desconfianza sobre los datos generados por el gobierno relacionados con el clima, con las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y en general con sus estadísticas ambientales, pues no hay transparencia ni credibilidad en los datos.
Alicia Villamizar asegura que existen dudas y desconfianza sobre los datos generados por el gobierno relacionados con el clima, con las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y en general con sus estadísticas ambientales, pues no hay transparencia ni credibilidad en los datos.

Otra investigación en el país ha demostrado el aumento del nivel del mar en las costas de Falcón, donde se ha registrado pérdida de línea costera, trabajo que adelanta la propia Villamizar desde el año 2007 y que, sumado a la investigación de la ULA, evidencian que el país ha sufrido cambios en dos de sus ambientes: alta montaña y costas, dice la bióloga. “En estos momentos se espera que los gobiernos estén trabajando en identificar las necesidades y las opciones de adaptación, y para Venezuela, es crucial actualizar  la información levantada en 1996 sobre los impactos por aumento del nivel del mar en nuestras costas y, en lo que respecta a salud, considerar previsiones de mediano y largo plazo dentro de las políticas públicas de ese sector, para atender el aumento del área de influencia de vectores causantes de enfermedades, por aumento de la temperatura promedio en varias regiones del país, como han indicado los modelos de simulación climática para Venezuela según estudios realizados por investigadores de la UCV”.

Literatura confiable

La bióloga asistió a la 4ta Reunión General del Grupo de Trabajo II del Panel Intergubernamental de Cambio Climático, realizada en septiembre pasado en Eslovenia, donde se adelantó el trabajo de revisión del documento de avance sobre los impactos, la vulnerabilidad y la adaptación, que será divulgado a mediados de marzo de 2014, y sobre el cual ya se han realizado tres reuniones previas en las que participan alrededor de 300 científicos de todos los países.

Los documentos de avance incluyen información científica, técnica y política, y deben ser revisados por los gobiernos, dice la profesora. “Es la revisión de la literatura científica mundial actualizada con la cual se elabora el documento, y que se presenta a los gobiernos; éstos revisan, hacen observaciones y pueden aprobarla o rechazarla, pero, desde 2001, el gobierno de Venezuela no participa en la revisión de esos documentos de avance”.

Villamizar explica que los informes del IPCC plasman la información actualizada generada por la comunidad científica representativa de todos los países del mundo, en relación con el clima y el cambio climático. Los científicos se organizan en grupos de trabajo para elaborar, cada 7 años, los informes de evaluación del cambio climático que dan sustento científico a la Cmnucc en relación con las bases científicas (Grupo I), los impactos, adaptación y vulnerabilidad (Grupo II) y la mitigación (Grupo III), además de un cuarto grupo conocido como Task Force que se encarga de los Inventarios de GEI. 

Para la elaboración del Quinto Informe sobre el Cambio Climático, se incluyeron las indicaciones derivadas de una revisión independiente de los procesos y procedimientos del Panel, realizado por el Consejo de Inter Academias (IAC por sus siglas en inglés), dice la experta, a fin de evaluar el estricto cumplimiento de procesos, estándares, pasos y previsiones que guían la filosofía de trabajo del Panel. Para cualquier información complementaria acerca de cómo funciona el IPCC, Villamizar, recomienda visitar el link http://www.ipcc.ch/organization/organization_procedures.shtml#.UlRUDmzD_Dc.

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