En Caracas la distribución de agua es desigual

Roger Martínez: “En las zonas informales no hay una buena red de distribución”.
Roger Martínez: “En las zonas informales no hay una buena red de distribución”.

El estudio liderado por Roger Martínez, del Ieru USB, y realizado para la Alcaldía Metropolitana de Caracas, recomienda invertir en infraestructura, desarrollar una política de consumo racional y recobrar el protagonismo de los municipios en la gestión del servicio

Elsa Pilato /Departamento de Información y Medios USB.-

Cada habitante del Área Metropolitana de Caracas (AMC) en promedio tiene una dotación de agua de 510 litros por día (lpd), pero la realidad indica que la repartición del líquido es desigual entre sectores, algunos de los cuales no alcanzan los 150 lpd de suministro.

El profesor Roger Martínez, investigador del Instituto de Estudios Regionales y Urbanos (Ieru USB), explicó que la situación más grave se presenta en zonas como El Junquito, Hoyo de la Puerta, Turgua, Sabaneta, La Unión, Gavilán, Petare, Fila de Mariche, Autopista Guarenas-Guatire, donde la inexistencia de una adecuada red de distribución, más la localización alejada de las redes formales de la ciudad, repercuten en situaciones precarias de suministro.

Otros sectores (Macarao, Las Adjuntas, Antímano, Mamera, Catia, Avenida Sucre, La Vega, Coche – El Valle, Cementerio, Santa Mónica y Concresa) cuentan con dotaciones entre 150 y 450 lpd, en ellos “coexisten áreas de desarrollo formal con áreas informales, por lo cual el suministro de estas últimas puede suplirse desde distintos puntos, pero con baja calidad de servicio, debido a la inexistencia de una red formal de distribución”. Asimismo, existen zonas de la ciudad (Casco Central, Caricuao-Zoológico, Paraíso, Montalbán, La Trinidad, Alto Hatillo, El Cafetal, Los Ruices, entre otras) con dotaciones mayores a 450 lpd, incluso superiores a 1.000 lpd, como por ejemplo Fuerte Tiuna, Sabana Grande, Bello Monte – Las Mercedes.

El trabajo abarcó los cinco municipios caraqueños.
El trabajo abarcó los cinco municipios caraqueños.

Los datos son parte del estudio sobre los servicios de agua potable y alcantarillado sanitario de los cinco municipios del AMC que realizó Martínez junto a un equipo de trabajo para la Alcaldía Metropolitana de Caracas, y que produjo tres informes: el diagnóstico actual de estas redes, el futuro proyectado al año 2030 y la estimación de costos y gestiones que habría que hacer en la ciudad en la materia. “No a todos los habitantes de la ciudad les llega el agua por igual, se debe invertir en la infraestructura de la red de distribución y recolección para aumentar la dotaciones per cápita en las áreas de menos de 150 lpd; mantenerlas o mejorarlas en los sectores de 150 a 450 lpd; y reducirla en los sectores de más de 450 lpd con una política de reducción de consumo, de pérdidas y de descargas indebidas”.

Martínez indicó que el agua llega con facilidad desde las estaciones de bombeo y plantas de distribución a los sectores situados entre la cota 800 y 940 metros sobre el nivel del mar (msnm), pero por arriba de la cota 940 se requiere más bombeo y más almacenamiento. “Este es el problema de las zonas informales, no hay una buena red de distribución. Un ejemplo es La Palomera, en Baruta, que cuenta con un buen alimentador para el suministro, pero no tiene un adecuado sistema de distribución, y puede estar 3-4 días de la semana sin agua”.

En cuanto a las aguas residuales, el estudio indica que se mantiene la descarga al Guaire “y por consiguiente al río Tuy, el cual ya registra una importante contaminación antes de la confluencia con el río Guaire”. Un grave problema, señaló Martínez, son las descargas indebidas y violatorias de la legislación ambiental que se hacen al río Guaire. “Una de ellas es la del sector El Encantado, donde se botan escombros y materiales, que genera, además de contaminación, un problema de vulnerabilidad por las inundaciones que puede provocar que el material acumulado represe el río en momentos de grandes avenidas de agua”.

Equipo

El estudio fue coordinado por Roger Martínez con la asistencia de Yurimia Ramírez, y el equipo de especialistas estuvo conformado por José Najul (cloacas y drenajes), Carlos Corrales (modelo hidráulico del acueducto), Juan Papadakis (Sistema de Información Geográfico), Rebeca Malaver como asistente y los estudiantes de Urbanismo Alba Mora, Susan Rojas, Yohany Socas y Oriana Medina.

El trabajo recomienda que se rescaten las competencias municipales en materia de gestión del servicio de agua e ir hacia un modelo que separe las funciones de operación, supervisión y planificación en entes autónomos. “Se puede pensar en la autogestión, entregarle a la población la administración del acueducto. El Ieru puede contribuir en la organización de la gente, dándole herramientas en participación y gobernabilidad y asesoramiento técnico”.

El Ieru es una unidad operativa de la Fundación de Investigación y Desarrollo, Funindes USB.

Fotos: Javier Zamora

Publicaciones Similares

Un comentario

  1. Este tipo de publicaciones me parecen de gran beneficio ,inclusive a la hora de escoger a donde mudarse ya que me mude a la parte alta del marques y esto es un martirio con el agua hay demasiado racionamiento y si vives en un edificio en donde no se interesen por mejorar las condiciones de tuberías y tanques de agua peor!!!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *