“Para elaborar dulces hay que estar alegre y hacerlos con amor”

XXIV Semana de Estudios Generales

La historia, la tradición y los detalles de elaboración de la dulcería criolla de Naiguatá, contados por Zoraida Díaz Romero, popular hacedora de dulces, animaron a los participantes de la clase abierta Encuentro con la tradición gastronómica, celebrada en la Casa Colonial de la Sede del Litoral como parte de la programación de la XXIV Semana de Estudios Generales.

La señora Zoraida conversó sobre la diversidad de dulces criollos que existieron en Naiguatá y cuyas recetas y secretos han pasado de generación en generación.

Habló acerca de los secretos (la oralidad) que se teje en torno a la elaboración de los dulces. Por ejemplo, contó, no debe haber “mirones” cuando la conserva quemá, una vez elaborada, se está vaciando y dándole su forma respectiva. Los “mirones” pueden ocasionar que se desmorone el dulce.

Díaz también advirtió que para elaborar los dulces se debe de estar alegre y hacerlos con mucho amor. Contó dos desagradables experiencias que vivió por elaborar dulces estando a disgusto. La primera sucedió cuando se encontraba atravesando un problema y pareciera que esto impregnó el postre, dijo, tanto así que muchos de los comensales comenzaron a mantener conversaciones bastante acaloradas. La otra experiencia fue en una oportunidad que la tristeza invadía su corazón y preparó un torta que le habían encargado para celebrar un cumpleaños; el resultado fue que quienes comieron la torta durante la celebración, se llenaron de nostalgia y sus rostros se cubrieron de lágrimas.

 

 

Este encuentro se realizó en el marco de la asignatura de Estudios Generales “Tradiciones y Oralidad”  (FCL 141), que dicta la profesora Sergia Cadenas, adscrita al Departamento de Formación General y Ciencias Básicas.

Zoraida Díaz Romero con todas sus anécdotas del realismo mágico y lo real maravilloso, enriqueció la investigación que realizan los estudiantes que cursan la asignatura y con la degustación posterior, que tuvieron la oportunidad de realizar, se recordó a los antecesores y cómo, a su estilo, prepararon alguna vez la “barriga vieja”, la conserva de coco, el dulce de almendrón y hasta bebidas afrodisíacas.

El encuentro, muy ameno y participativo, contó con la intervención de la hermana de Zoraida, que amplió la información explicando sobre la celebración del Corpus Christi y los Diablos Danzantes de Naiguatá.

Fotos: Jhonny Castro