Orden 18 de julio premió la permanencia y solidaridad de los uesebistas

Lisbeth Bernal / Departamento de Información y Medios USB.-

Durante la entrega de la Orden 18 de Julio realizada la semana pasada, el rector Enrique Planchart, aprovechó la ocasión para felicitar a todos los trabajadores por su solidaridad con la institución “pese a la crisis que atraviesa la universidad y que impide su funcionamiento normal”.

La Orden la recibieron este año, 247 trabajadores administrativos, docentes y obreros de la USB, por años ininterrumpidos de servicio en la institución. “Este premio es un homenaje a todos sus trabajadores, porque son ustedes quienes hacen posible la Universidad de la Excelencia”, dijo el rector, resaltando al mismo tiempo, que el problema más grave que enfrenta actualmente la USB es la fuga de personal académico, administrativo, técnico y obrero.

“En estos momentos –manifestó-, no se ve una luz al final del túnel debido a que el gobierno nacional todavía no se da cuenta de la importancia de las universidades y su papel en el progreso del país. Hoy día, el progreso de la sociedad se debe fundamentalmente a la gente preparada y capaz de producir riqueza, y esa gente se forma en las universidades y por eso, ellas son fuente de riqueza”.

Esto, aseguró, lo han entendido no sólo los países desarrollados, sino también países vecinos de nuestra región como Colombia, Ecuador, Chile, Brasil, los cuales se encuentran invirtiendo en los profesores, a través de políticas públicas y programas de estímulo como el reconocido “Prometeo”, lo que está generando la salida del país de valioso talento académico venezolano.

Ahora, se le añade a esta preocupante situación expuesta por el Rector, la migración de sus trabajadores administrativos, técnicos  y obreros al sector empresarial, en busca de mejores salarios y beneficios socioeconómicos, pues en los últimos 16 años, todos sin excepción, han  sufrido un deterioro de sus ingresos y por ende, de su calidad de vida.

En consecuencia, el profesor Planchart enfatizó que este homenaje no es sólo por años de servicio, sino también por ese espíritu luchador e inquebrantable del personal que por encima de sus bajos ingresos, continúa solidario con la Universidad Simón Bolívar ofreciendo su mejor esfuerzo para mantener a la institución entre las primeras del país.

Recientemente, la USB se ubicó en el puesto 34 de Latinoamérica y
en el segundo lugar de Venezuela, de acuerdo con el Ranking Quacquarelli
Symonds 2015 (Ranking QS).