| |

Las tribus urbanas en el banquillo de la academia

Asistieron cerca de 120 orientadores provenientes de diferentes liceos de Caracas.

Soraya Villarreal /Departamento de Información y Medios USB.-

Tal vez para muchos, nombres como floggers, metaleros, góticos, tukis, fresas, roqueros, emos, y una larga lista de denominaciones, no tengan que ver con su entorno. Sin embargo, las tantas agrupaciones a las que pertenecen cientos de adolescentes de las ciudades, son motivo de críticas, ataques y burlas, considerando que la vestimenta, lenguaje y expresiones corporales y verbales que usan, hacen voltear la mirada y preguntarse qué relación tienen con la vida cotidiana.

Las culturas o tribus urbanas, como se conocen todas estas agrupaciones de adolescentes que pululan por plazas, centros comerciales y otros espacios citadinos, fueron identificadas a través de una aproximación académica, durante el VIII Encuentro de Orientadores de instituciones oficiales de educación media del Área Metropolitana, Miranda y Vargas-USB, que anualmente organiza la Simón Bolívar a través del Departamento de Asesoramiento Humano dela Dirección de Desarrollo Estudiantil, y que en esta edición, al que asistieron cerca de 120 orientadores provenientes de diferentes liceos de Caracas, se tituló Culturas urbanas actuales: Crisis o configuración de la identidad juvenil y su aproximación desde la educación.

Este encuentro viene a ser “una manera de acercarse a un tema que habla desde diferentes lugares para intentar informar sobre el surgimiento de estas culturas, el interés por definirlas considerando la identidad, la cultura, los referentes simbólicos y la socialización, como parte de una misma realidad”, según refirió Adriana Mantilla, coordinadora del evento.

Adriana Mantilla, coordinadora del evento.

Se trata, dijo Mantilla, de conocer en qué medida la educación responde a las expectativas de las nuevas generaciones y revisar el sentido de la experiencia escolar para el adolescente, que con el tema de las Culturas Urbanas, crisis o configuración de la identidad juvenil y su aproximación desde la educación, “deja entrever el planteamiento de si la pertenencia a estos grupos es un modo o una práctica que pueda contribuir a esa configuración de identidad del adolescente, o si por el contrario, son manifestaciones directas y poco elaboradas de las crisis propias de la condición de adolescente y se erigen en consecuencia, como comportamientos erráticos o situaciones problemas que buscan constantemente transgredir las normas sociales establecidas”.

Para la psicóloga Zahiry Martínez, la identidad que buscan los jóvenes no es un concepto que está en el aire, sino que tiene contexto, época y condiciones donde influyen ciudad, familia, hogar, discursos, amigos, y un largo etcétera.

Martínez, profesora de las universidades Central de Venezuela, Alejandro de Humboldt y Simón Bolívar, hizo la presentación titulada Matices del ser adolescente: pistas para acercarnos al abanico identitario de los jóvenes venezolanos, en la que explicó el surgimiento en el país de “una serie de manifestaciones en las formas de actuar de los jóvenes que han sido caracterizadas como problemáticas, porque escapan del control normativo, son fuentes de riesgo y peligro para el orden social, al tiempo que empleamos términos como delincuentes, pandilleros, malandros o flojos para, de alguna manera, catalogarlos”.

La psicóloga describió cada una de las mencionadas tribus urbanas, y se pregunta qué querrán decirnos estos jóvenes con todas estas manifestaciones, considerando que la cultura urbana la compone un tejido social con una serie de actores que no son homogéneos, y que se pueden caracterizar a partir de dos dimensiones, la cultura juvenil y la violencia urbana, donde la segunda es consecuencia de la primera. 

Más allá de la identidad

Zahiry Martínez considera que tal vez los jóvenes están intentando construir nuevos modelos de sociedad, nuevas subjetividades o nuevos modelos de identificación por modas, el problema es cómo hacer para comprenderlos.

Zahiry Martínez, profesora de las universidades Central de Venezuela, Alejandro de Humboldt y Simón Bolívar.

Sobre este aspecto, la psicóloga considera dar un giro a la mirada de quien los observa, no ponerse al frente del problema, sino en torno a la situación, tomar en cuenta la participación de los medios de comunicación y del creciente auge del consumo de ciertos bienes, a los cuales los jóvenes asignan sentido y valor; “aprovechar los puentes que ellos mismos construyen con sus referentes locales, y a partir de allí procurar lazos de comunicación entre las instituciones educativas y culturales, con los procesos de construcción de sus imaginarios y sus necesidades”.

Para concluir su presentación, Martínez explicó que las tribus urbanas, sin importar cómo se denominen, patineteros, rastas, hippies, grafiteros, metaleros, y los mencionados anteriormente, hablan de la transformación de los mecanismos clásicos de organización social, y de una actitud de resistencia, de protesta, de crítica, con potenciación del goce, la exacerbación de la percepción sensorial de aquello clasificado como prohibido y donde lo afectivo cobra una dimensión fundamental.

“Su manera de actuar y pensar gira en torno a la oposición de un deber ser que no corresponde propiamente con su visión del mundo, por lo que tenemos que pensar en un modelo de madre, padre, maestro, ciudadano e incorporarlos a nuestras vidas”.

Fotos: Alfredo Tetán

 

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *