“El conocimiento solo se logra a través de un sistema educativo de calidad”
Antonio José Hernández recibió la distinción de Profesor Emérito
Perteneciente a la Sección de Fisicoquímica, Antonio José Hernández fue uno de los profesores fundadores de la carrera Licenciatura en Química a inicios de los años setenta. El Consejo Directivo consideró sus méritos como formador de “profunda influencia” en sus estudiantes, y sus aportes a la investigación que lo erigieron como una referencia internacional en el conocimiento y caracterización de moléculas del tipo van der Waals
Elsa Pilato / Departamento de Información y Medios USB.-
En medio de la crisis del país, se impone la perseverancia para mantener el nivel de calidad de la universidad, y en esta tarea la docencia debe ser valorada como fundamental en la función universitaria, junto con la investigación y responsabilidad social, para garantizar la superación de las desventajas sociales, expresó Antonio José Hernández, durante el acto académico en el que se le confirió la distinción Profesor Emérito de la USB.
Hernández, quien fue reconocido por sus significativas contribuciones a la docencia, investigación y extensión en diferentes áreas de la Química, señaló que “Venezuela requiere de instituciones sólidas y permanentes en el tiempo que permitan el desarrollo y máxima utilización de las capacidades de los científicos y tecnólogos de nuestras universidades y centros de investigación”.
Destacó el “indiscutible valor” de las universidades para el desarrollo y crecimiento de las naciones. “La mayor riqueza de un país es el conocimiento, lo cual solo se logra a través de un sistema educativo de calidad y un recurso humano bien formado. La universidad debe formar profesionales creativos, abiertos a nuevas ideas y a la diversidad, que se integren a la comunidad del conocimiento global y aporten sus conocimientos en beneficio de la sociedad. La comunidad científica de Venezuela está en la obligación de señalar las rutas a transitar en el desarrollo de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación, en su tránsito hacia una sociedad del conocimiento, que nos ayude a resolver los enormes problemas y desigualdades que nos aquejan”.
En el segmento de su discurso que tituló “Academia y oportunidad histórica”, Hernández resaltó las oportunidades educativas y de superación académica que llegaron con la era democrática iniciada en 1958 y que contaron con el respaldo de los cuantiosos recursos que obtenía el país producto de la explotación petrolera. “En la década de los años 60, se observa un acentuado crecimiento de la matrícula universitaria, en el contexto de una política de ampliación de oportunidades educativas extensivas a todos los estratos de la población. Numerosos compañeros estudiantes, venidos de todos los rincones del país, hijos de humildes hogares venezolanos, todos cobijados con la esperanza de serles útiles a una sociedad, que sin egoísmos, les brindaba todos los medios a su alcance para adquirir conocimientos profesionales en un área científica de gran relevancia para nuestra industria petrolera y petroquímica”.
Luego de egresar como Licenciado en Química de la Universidad Central de Venezuela, recordó Hernández, a comienzos de los años setenta fue contratado como profesor en la USB, donde recibió el apoyo institucional para realizar estudios doctorales en la Universidad de Indiana (EEUU) con financiamiento del recién creado Conicit. Al culminar su formación y regresar al país, “sentimos la cálida acogida de nuestras ‘academias’, al proveer sin reparos medios financieros para dotar nuestros laboratorios con el equipo necesario para ejercer la docencia y la investigación competitiva a nivel internacional, lo cual permitió desarrollar nuestro potencial como profesores e investigadores de universidades y centros de investigación del país”.
El Consejo Directivo acordó el 8 de octubre pasado conferirle a Antonio Hernández la distinción de Profesor Emérito, por haber desarrollado una actividad académica integral, “en la que destacan su espíritu de creación y crecimiento académico, su capacidad de orientación a logros concretos, su ética profesional y sólidos principios”.
El cuerpo también valoró su labor como tutor académico y su “profunda influencia en sus estudiantes por su facilidad para transmitir conocimientos”; así como su significativa labor de investigación, reconocida en el ámbito internacional, “en el área de fisicoquímica teórica, en particular por su contribución en el campo de la fisicoquímica cuántica, química computacional, catálisis heterogénea y óptica no lineal, entre otros”.
Líder en conocimiento de moléculas van der Waals
Antonio Barriola, profesor del Departamento de Química, fue el encargado de pronunciar el Discurso de Orden, durante el cual destacó los inicios de la formación de Antonio Hernández en la Facultad de Ciencias de la UCV, “escuela moderna, con énfasis en las actividades de investigación”, donde “descubrió las claves de la química cuántica y con la tutoría de un joven investigador ecuatoriano, recién llegado con posdoctorado en París, Eduardo Ludeña, Antonio demostró ser un estudiante ejemplar, de carácter reservado, amigo de sus amigos y el mejor exponente, conocedor y manejador en nuestra generación de los misterios inherentes a la química cuántica”.
En 1977, Hernández obtuvo su PhD, trabajando bajo la dirección del profesor Peter Langhoff en el área de la química teórica o cuántica, y aunque tuvo una oferta para hacer un postdoctorado en Caltech, decidió regresar a Venezuela para reincorporarse a la Sección de Fisicoquímica del Departamento de Química de la USB.
En los años ochenta ejerció como jefe del Departamento en dos períodos distintos, y en 1988 fue distinguido con la Beca Alexander von Humboldt, beca vitalicia otorgada por los méritos adquiridos por su constante y original labor de investigación.
Barriola indicó que la beca le permitió permanecer en Alemania dos años e involucrarse con el Dr. Diercksen en el Instituto Max Planck de Astrofísica en Munich, en el estudio de las propiedades eléctricas de moléculas pequeñas. “Estos estudios y su trabajo constante permitieron a Antonio destacarse con el tiempo como un líder en el conocimiento y caracterización de moléculas del tipo van der Waals. Sus publicaciones científicas en moléculas de van der Waals hoy son referencias internacionales, cuando se quiere examinar cómo se constituyen en su estructura, qué tipo de propiedades poseen y cómo es su espectro de energía”.
Al regresar de Alemania a finales de 1989, “Antonio logra a través de la Fundación Humboldt y con la ayuda de HP-Venezuela el financiamiento necesario para la creación del Laboratorio de Química Computacional”, que hoy se mantiene en funcionamiento.
Barriola aportó algunas cifras que dan cuenta de la productividad científica del nuevo Profesor Emérito de la USB: 75 publicaciones en revistas y journals especializados; 8 aportes en libros del área de la química cuántica; numerosas charlas, seminarios, congresos; editor de Teochem – XXXI Quitel 2005 y New Developments in Quantum Chemistry, Research Singpost 2009.
El rector Enrique Planchart indicó que el reconocimiento a Antonio Hernández representa la exaltación de los valores universitarios: “trabajo, honestidad, perseverancia, desarrollo y contribución al país”. “Profesores como Antonio Hernández han dedicado su vida, trabajo y esfuerzo para que la juventud venezolana tenga una formación de calidad”.
Fotos: Javier Zamora
