USB se endeuda para mantenerse operativa
Soraya Villarreal / Departamento de Información y Medios USB
El futuro alcanzó a la USB en materia de déficit presupuestario. La profundización de la crisis que desde finales de 2010 y comienzos de 2011 había sido anunciada por las autoridades debido a la aprobación de un presupuesto recortado, tocó las puertas de la Simón Bolívar, y ya agotadas las partidas de los servicios estudiantiles, la Universidad ha comenzado a endeudarse con los concesionarios a partir del 1 de junio para mantener operativos los comedores y transportes.
En la reunión convocada por las autoridades para informar sobre la situación de la USB, el Rector Enrique Planchart advirtió que de los créditos adicionales anunciados por el presidente del país para las universidades y cuya distribución depende de la Asamblea Nacional, todavía no se tiene ni la más mínima información de cuánto corresponde a cada casa de estudios, ni a qué partidas estarán destinados. “Apenas sabemos que el dinero para pagar el aumento de 40% correspondiente a mayo salió del propio presupuesto universitario mediante un adelanto de las nóminas de noviembre o diciembre”, dijo Planchart.
Por su parte, el vicerrector administrativo, William Colmenares, explicó cómo afecta la crisis presupuestaria en tres ámbitos: gastos de limpieza y mantenimiento de jardines, servicios estudiantiles y HCM de todo el personal (académico, administrativo y obrero), para el cual se requieren 22 millones de bolívares si se quiere mantener funcionando el plan como hasta junio de este año.
En un correo dirigido a toda la comunidad el pasado 14 de junio, el despacho administrativo informó las medidas de contingencia acordadas en la Comisión de Salud para el HCM, entre las que están la suspensión del pago de casos ambulatorios, reembolsos y medicinas.
Colmenares explicó que el plan salud de la USB sobrevivió en 2010 gracias a las contribuciones de los fondos de jubilaciones, y que, actualmente el gasto mensual que presenta el plan (de los tres sectores) es de 4 millones de bolívares, de los cuales más de 1 millón de bolívares son destinados a pagos de reembolsos por medicinas.
En lo que respecta a los servicios estudiantiles, Colmenares indicó que se requieren 18 millones de bolívares para mantenerlos, y que desde el pasado 1 de junio cada plato de comida que se sirve es una deuda que está contrayendo a la universidad, pues el presupuesto para estos servicios está agotado. “Mensualmente el servicio de comedor requiere de por lo menos 2 millones de bolívares para su funcionamiento en desayunos, almuerzos y cenas, y la partida sólo tiene 83 mil bolívares”, manifestó el vicerrector.
En materia de limpieza y jardinería, la realidad es evidente. Algunos jardines están siendo devorados por la maleza y la limpieza de oficinas y salones es mínima. En este rubro se gastan 93 mil bolívares al mes; el presupuesto asignado para 2011 es de 1 millón 700 mil, y a la fecha ya se han ejecutado 1 millón 600 mil bolívares, lo que significa que a partir de julio no habrá disponibilidad financiera para jardinería.
Colmenares también mencionó que no hay dinero para la compra de implementos de ningún tipo (bombillos, cerraduras, puertas, etc.), utilizados para darle mantenimiento mínimo a la planta física.
El vicerrector académico, Rafael Escalona, comentó que en Consejo Directivo se había rechazado la asignación presupuestaria para 2011; la Universidad había solicitado un crédito adicional por 800 millones de bolívares para funcionar durante todo 2010 y sólo le aprobaron 405 millones de bolívares, por lo tanto, el presupuesto solicitado para los requerimientos mínimos de la Universidad para 2012 es por mil millones de bolívares.
La presentación del Vicerrector Administrativo se puede ver aquí.
Fotografías: Alfredo Terán
