Planchart: “La USB nació en respuesta a una política de Estado compartida, no por un capricho presidencial”
Lisbeth Bernal / Departamento de Información y Medios.-
Hoy, durante el acto de de imposición de botones y entrega de diplomas de la Orden 18 de Julio a 262 trabajadores, entre académicos, administrativos y obreros de la USB, el rector Enrique Planchart recordó los inicios de la institución, manifestando que deberíamos volver a trabajar juntos por un proyectos de país compartido, tal como ocurrió en 1967, año en el cual se firmó el decreto de creación de la Universidad Simón Bolívar.
“El triunfo de la Vinotinto nos unió a todos y tenemos que conservarlo y trabajar por esa unión. Hay mucho que hacer y lo lograremos”, comentó, luego de hacer un recuento sobre la historia de la universidad creada como producto del primer pacto de gobernabilidad que marcó al país, el Pacto de Punto Fijo.
Según ese pacto, afirmó Planchart, la educación era prioridad y en consecuencia, en aquellos tiempos, presididos por Raúl Leoni, se construyeron escuelas en todas las capitales del país y se abrieron nuevas universidades como la UDO y la USB.
En ese momento, dijo, la situación del país era difícil por la guerrilla cubana que intentó instalarse en territorio venezolano y que culminó con un enfrentamiento en donde murieron cubanos y venezolanos que pensaban que, abrazando esa revolución, vendría un cambio positivo para el país.
No obstante, pese a tal incidente histórico, el rector aseguró que en ese momento se continuó respirando un clima de confianza y se continuó el desarrollo de un proyecto nacional de país, que permitió el crecimiento de nuevas instituciones. Así nació la USB, “en respuesta a una política de Estado compartida, no por un capricho presidencial”.
De hecho, parte de ese gran apoyo gubernamental se evidencia con el financiamiento que obtuvo la USB por parte del Banco Interamericano de Desarrollo para construir la mayoría de los edificios que conforman el campus universitario. Hecho que contrasta con la actualidad, ante la asfixia que vive la institución mediante la grave y constante disminución del presupuesto anual que hoy limita el funcionamiento de todos los programas y servicios que presta la USB, señaló.
Bajo esta situación de penuria, explicó el rector, la USB trabaja para conseguir recursos propios que impidan el cierre de importantes iniciativas como el Programa de Igualdad de Oportunidades, que actualmente cuenta con recursos provenientes de la empresa privada que permitirán mantenerlo abierto hasta diciembre de este año.
Para el Planchart, estos reconocimientos que se realizan en paralelo a la celebración del decreto de creación de la USB, son bien merecidos por el personal universitario, por su esfuerzo y dedicación en la construcción de la institución. Especialmente, destacó el sacrificio que realiza día a día el personal administrativo y obrero para mejorar y apoyar a la universidad.
Antes de cerrar su intervención anunció la creación de una unidad dirigida al crecimiento profesional del talento humano de la USB.
Obreros, administrativos y profesores hablan
Por el sector obrero tomó la palabra Joel Chávez, quien describió a la USB como su primera casa y expresó el orgullo que siente al trabajar 20 años ininterrumpidos en la institución.
“Nosotros también formamos a estudiantes y profesionales, cuenten con ese apoyo, porque nosotros no somos únicamente comunidad universitaria, somos una familia, que en las buenas y en las malas debe estar unida. Somos USB y lucharemos por esta universidad”, dijo.
El sector administrativo y técnico estuvo representado por Nataly Montezuma, quien considera que todos los sectores que hacen vida en la institución son pilares fundamentales, que hoy como todos los días, deben trazarse nuevas metas y logros.
Uno de esos retos, señaló, debe consistir en “lograr la participación del personal administrativo, técnico y obrero en la elección de las autoridades universitarias”, pues, a su juicio, hay que “exigir los derechos y ser partícipes en los debates nacionales para mejorar a la sociedad venezolana”.
Por el sector académico intervino Elia García, cuyo discurso se centró en promover el trabajo en conjunto, la cooperación, la defensa de la identidad institucional uesebista y el cumplimiento de las cosas ordinarias bien hechas, porque eso es en su criterio, lo que necesita la USB para salir adelante y para que sus miembros continúen mereciendo el reconocimiento por muchos años más.
De acuerdo con García, los años pasan, las personas cambian pero las instituciones quedan y precisamente, es la riqueza que le otorga el trabajador, sin importar el cargo que ocupe, lo que se valora y se reconoce, “porque todos somos importantes”.
262 distinguidos
La Orden 18 de Julio fue creada en Consejo Directivo del año 1989 para conmemorar el XVIII aniversario del Decreto de Creación de la Universidad Simón Bolívar, “destinada a recompensar méritos distinguidos en años de servicios al personal docente, administrativo, técnico y obrero de la USB”, y se entrega sólo a quienes estén en servicio activo.
En esta ocasión fueron distinguidos 262 trabajadores. La Orden en Primera Clase la recibieron quienes cumplieron 20 años de servicio, la Orden en Segunda Clase, aquellos que cumplieron 15 años, y la Orden en Tercera Clase, los que alcanzaron los 10 años. Listado de quienes obtuvieron la Orden.
A esta cita, asistieron el secretario, Cristián Puig, quien leyó la resolución que creó la Orden 18 de Julio, el vicerrector académico, Rafael Escalona, el vicerrector administrativo, William Colmenares, el director de la Sede del Litoral, Feliberto Martins, así como representantes de la Apusb, Atausibo y Sutes, acompañados por el ex rector Marcelo Guillén.
Fotos: Alfredo Terán
