USB expuso oferta de investigación al sector empresarial

Lisbeth Bernal

Casi un centenar de empresas respondieron a la convocatoria de la USB formulada en el marco del cumplimiento de lo establecido en la Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología e Innovación, Locti, y su reglamento vigente desde octubre 2006. El encuentro efectuado el pasado miércoles le permitió a la universidad presentar su oferta de proyectos de investigación y desarrollo a las empresas, además de informar algunas metas del Plan de Ciencia y Tecnología, los objetivos de la Locti y el procedimiento que deben realizar las empresas para invertir en proyectos de desarrollo y cumplir con la Ley.

La cartera de proyectos expuesta incluyó desde el equipamiento en infraestructura de los laboratorios hasta más de 50 trabajos de investigación aplicada, tres de ciencias básicas y el financiamiento de iniciativas como el Centro de Estudios Orientales, el Banco de Proyectos de Extensión, el Centro de Convenciones, entre otros, más actividades de intercambio, formación y extensión, adquisición de equipos e incubación de empresas.

Uno de los proyectos de mayor inversión es el relativo a la actualización de los laboratorios ya que asciende a los 100 millardos de bolívares, según datos suministrados por el profesor Marino González, gerente de planificación y desarrollo de la Funindes – USB.

Según la naturaleza de los proyectos y las capacidades generales de la USB, el profesor González, mostró una lista de las instancias que canalizarán los trabajos, entre ellas citó los decanatos de Investigación y Desarrollo, Postgrado y Extensión, las direcciones de Desarrollo Profesoral, Relaciones Internacionales, Asuntos Públicos, Unidad de Laboratorios, Parque Tecnológico Sartenejas y Funindes.

El procedimiento para concretar el apoyo de la empresa hacia la universidad consta de seis pasos descrito por González, la inscripción en el Observatorio Nacional, la certificación de inscripción, el diseño del Plan Anual entre los equipos empresa-universidad, la firma de un convenio general para los próximos cinco años, el desarrollo de proyectos específicos y el ordenamiento interno.

Para el rector Benjamín Scharifker, la Locti abre extraordinarias oportunidades para la ciencia, la tecnología y la innovación, debido a que incorpora novedades. “Ahora está en nuestras manos saber aprovecharla para que sea un instrumento que sirva efectivamente para el desarrollo y el bienestar de la nación”, expresó en el encuentro universidad-empresa.

De acuerdo al Rector, las oportunidades que se abren no sólo incorporan a todos los aspectos de la vida económica del país, sino además proveen mecanismos antes ausentes como los capitales de riesgo.

“Existe correlación entre la producción de conocimiento y el Producto Interno Bruto, PIB. Los países que más conocimiento producen son lo que tienen más PIB. Venezuela por ejemplo, está bien ubicada en esa relación, cabría preguntar si es que la generación de conocimiento es consecuencia de la generación de valor o viceversa, y esa, es una pregunta para analizar que está en el fondo de la Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología e Innovación”, expresó el Rector.

Conociendo la Locti
Antes de presentar los proyectos 2006, González explicó los aspectos fundamentales de la Locti, ante la poca información que manejan las empresas, según los resultados de una encuesta realizada en la reunión y cuyos resultados eran expuestos de manera casi instantánea, tras las preguntas.

Sobre la Locti, se mencionó que toda empresa que tenga ingresos brutos mayores a cien mil unidades tributarias debe hacer el aporte. Específicamente, las empresas de hidrocarburos e hidrocarburos gaseosos deberán aportar el 2%, las dedicadas a la explotación minera, distribución y transmisión de electricidad el 1% y las de otros sectores de producción el 0.5%.

A través de cuatro actividades, González ilustró los objetivos de esta Ley: el desarrollo de capacidades tecnológicas, la adquisición y apropiación de nuevo conocimiento, el desarrollo del Capital Humano de la empresa, y la difusión y transferencia de conocimiento.

En ese sentido, dijo, las empresas pueden invertir su aporte en la creación de premios a la investigación, el desarrollo o la innovación, en la organización de eventos científicos, la consolidación de redes nacional e internacional de cooperación científica, tecnológicas y de innovación, la formación de unidades de vinculación entre centros de investigación y desarrollo y las empresas, para procesos de transferencia tecnológica, en programas empresariales de inserción laboral de personal venezolano desempleado altamente capacitado, en programas de movilización de investigadores, en la creación de postgrados integrados nacionales, en tesis de postgrado y pasantía de investigación de universitarios y “cualquier otra actividad que en criterio del Ministerio de Ciencia y Tecnología pueda ser considerada inversión en ciencia, tecnología, innovación y sus aplicaciones”.

Sin embargo, básicamente un proyecto califica siempre que su finalidad sea la sustitución de importaciones, productividad de la empresa, creación de redes de cooperación, apropiación social de conocimiento y fortalecimiento del Sistema Nacional de Innovación.

Próximos pasos
En el año 2007, se plantea la realización de varios pasos a fin de seguir el camino signado por la Locti. Entre ellos se encuentra el mejoramiento de la interfase empresas-USB a través de la www.usb-empresas.org.ve, la definición de demandas de transferencia e innovación del sector productivo, la actualización de la oferta de proyectos de la universidad, conformación de sus líneas de investigación, diseño de criterios para la elaboración y selección de proyectos y organización de encuentros específicos por sector productivo.