|

Las emociones determinan el aprendizaje

Lisbeth Bernal
Departamento de Información y Medios USB

 En el proceso de aprendizaje y enseñanza intervienen numerosas variables como las emociones. De hecho, según la psicóloga Adela Meier, las emociones determinan si el estudiante puede aprender o no en un momento dado.

“Las emociones dominan a la razón, por eso cuando ellas son intensas, bien sea positivas o negativas, impiden que el alumno atienda la clase”, dijo en el taller que se desarrolló en la USB, en el marco del II Re-encuentro de Orientadores de Instituciones Oficiales de Educación Media del área Metropolitana, Miranda y Vargas-USB. Evento que contó con la participación de representantes de 150 instituciones convocadas por la Sección de Orientación de la Dirección de Desarrollo Estudiantil de la Simón Bolívar, bajo la organización de las licenciadas Gabriela Ortega y Adriana  Mantilla.
El programa al igual que en su primera edición, estuvo dirigido a profesores, orientadores y trabajadores sociales de liceos oficiales con la finalidad de proporcionarles herramientas básicas para el trabajo con los adolescentes. Con este re-encuentro efectuado recientemente, se le hace seguimiento al segundo congreso celebrado a finales del año pasado.

Durante esta actividad se habló sobre las variables del aprendizaje y la enseñanza y estrategias que se pueden desarrollar para tener éxito en ambos procesos. Meier, quien es coordinadora del área psicoafectiva del Programa de Igualdad de Oportunidades de la USB y fue la profesora invitada para el re-encuetro, aseguró que el aprendizaje no es algo etéreo, sino algo concreto que queda grabado en el cerebro y se puede evidenciar a través de ciertos exámenes médicos.

Para obtener éxito, señala que los orientadores tienen que ser flexibles con respecto a la intensidad que le deben dar a los estímulos, es decir, saber cuándo es mejor elevar el tono de voz o cuándo hay que ceder el derecho de la palabra, porque los cinco sentidos son receptores de la información y sobre ellos hay que trabajar en la clases, con “la mayor claridad y la información ordenada y precisa”.

Sin embargo, pese a que se trabajen adecuadamente todos los sentidos enfatizó que las grandes emociones, buenas o malas, inciden en el aprendizaje. “Si el estudiante tiene miedo no aprende, por eso es importante que el profesor sea respetado sin infundir miedo, por ejemplo tenemos que trabajar con la palabra examen porque tiene una connotación de miedo que por lo general afecta el desempeño de los estudiantes”.

Transferir el liderazgo de la clase
Las clases magistrales tradicionales no son efectivas actualmente y esta situación exige mayor creatividad por parte de los orientadores y profesores, comentó Meier, agregando que en el aprendizaje también se puede combinar la música, el baile y cualquier expresión que sea popular entre los jóvenes. Aunque cualquiera de esas alternativas que se desarrollen, dijo, deben cumplir con las leyes de percepción visual.

Una propuesta efectiva consiste en transferir parte de la responsabilidad del profesor en los alumnos al asignarles como tarea que dicten una clase. También suelen ser positivas las dinámicas de grupo, mezclar a estudiantes avanzados con otros no tan adelantados en la resolución de un problema de manera que los estudiantes sean mediadores del aprendizaje.

Sobre cómo estructurar una clase, Meier explicó que en primer lugar está la indagación previa en la cual se debe preparar el estudiante en relación al qué y cómo va aprender, luego sigue lo que denominan el desarrollo, en el que apoyan los contenidos curriculares durante el proceso de enseñanza – aprendizaje y posteriormente, viene el cierre, que permite al estudiante formular una visión integradora y crítica de la materia.

Ventajas de los mapas mentales
Particularmente en el desarrollo, señala Meier se pueden adoptar propuestas creativas. Una técnica valiosa que se puede emplear a lo largo de toda la clase son los llamados mapas mentales, ya que utilizan la analogía del pensamiento para organizar y resumir la información.

Entre los tips de ayuda que brindó, Adriana Mantilla, psicóloga de la Sección de Orientación de Dide y organizadora del evento, sobre esta técnica está el utilizar palabras claves o una frase corta en el centro del mapa, a partir de la cual salen las ramificaciones que requiera el tema a desarrollar. “Es importante incluir imágenes, símbolos y color para poner a trabajar los dos hemisferios cerebrales del estudiante. El orden o la lectura del mapa debe seguir la dirección de las agujas del reloj”. Los beneficios de esta herramienta van desde aportar una visión global del tema, aumentar la capacidad de asociación de ideas, el desarrollo de la memoria, la creatividad y el pensamiento crítico hasta ahorro del tiempo.

En este segundo re-encuentro intervino además la licenciada Gabriela Ortega, también  psicóloga de la Sección de Orientación de Dide y organizadora del evento. Ella fue la encargada de explicar con detalle cada una de las variables del proceso de aprendizaje.

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *