Certificados los primeros trece Facilitadores de Gestión de Riesgo Hidrometeorológico de Naiguatá
Rina Pérez Barito
Departamento de Información y Medios
Fueron entregados los certificados de los trece primeros facilitadores de Gestión de Alto Riesgo, formados en el marco de la activación del Sistema de Alerta Temprana de Naiguatá que desarrolla la USB en alianza con la Universidad Central de Venezuela y la Embajada Británica.
Este grupo de participantes estuvo integrado por vecinos de Naiguatá y Camurí Grande, miembros de los consejos comunales de estos sectores, estudiantes de la Unefa, miembros del Grupo de Rescate Uria, funcionarios de Protección Civil Municipal, trabajadores de Hidrocapital, miembros del Club Playa Azul y empleados de la USB, quienes aprendieron, en esta primera fase, a estructurar un protocolo de actuación durante una situación de alto riesgo, difundir la alerta dentro de su sector, organizar a la comunidad, elaborar pluviómetros comunitarios, registrar los datos de las mediciones, desarrollar guiones para simulacros, entre otros. Los facilitadores de este taller fueron los profesores Abraham Salcedo y José Rafael Hernández, ambos pertenecientes al Departamento de Ingeniería Hidrometeorológica de la UCV, con el apoyo de las profesoras Lelys Bravo, coordinadora del Grupo de Gestión de Riesgos Ambientales de la USB (Gera), Isabel Llatas del Departamento de Procesos y Sistemas y miembro del Gera, y Leidy Alvarado, coordinadora del Equipo de Seguridad, Higiene y Ambiente de la Sede del Litoral.
Este proyecto, financiado por la Embajada Británica, pretende mantener educada a la comunidad en materia de riesgo a fin de que esta se mantenga alerta y atenta a las situaciones de inestabilidad que se produzcan en las cuencas de los ríos Naiguatá y Camurí Grande. De esta forma, los vecinos podrán identificar las amenazas de eventos naturales y prepararse para afrontar la situación de la mejor forma posible.
Alberto Berrizbeitia, representante de la Embajada Británica, destacó que esta experiencia ha sido muy positiva, ya que los participantes han desarrollado ampliamente sus conocimientos en cuanto al tema de Gestión de Riesgo, por lo que no les costará servir de facilitadores dentro de sus comunidades. “Esperamos que programas como este se multipliquen a lo largo y ancho del país, para nosotros como embajada representa un logro apoyar este tipo de actividades en las que la principal meta es preservar la vida”.
Berrizbeitia destacó que este proyecto responde al Programa de Cooperación Bilateral que mantiene la Embajada Británica, en el cual una de las áreas prioritarias es el ambiente y el tema del calentamiento global, abordando sus consecuencias como los deslaves e inundaciones y todos los eventos naturales causados por este fenómeno. Ante tal intención, la embajada se ha propuesto colaborar con las comunidades más vulnerables del país, apoyándolas en su formación en materia de riesgo.
