Luis Alberto Buttó: “Política venezolana pretende alterar el equilibrio militar regional”

IV Semana Latinoamericana y Caribeña en la Simón

Elsa Pilato / Departamento de Información y Medios USB.-

El sistema de transformación iniciado en 1999 hacia un nuevo sistema político y la construcción de un nuevo Estado, se ha expresado en el área de seguridad y defensa con un modelo que pretende alterar -para imponerse-, el equilibrio militar en la región latinoamericana y caribeña.

La afirmación corresponde al profesor Luis Alberto Buttó, director del Centro Latinoamericano de Estudios de Seguridad (Cles USB), quien durante el foro Seguridad y defensa en Venezuela, líneas centrales del Modelo Bolivariano, explicó que la política militar venezolana en el período 1999 – 2013 ha tenido tres vertientes: una oficial, otra oficiosa y la de facto. “La política oficial la conforman los documentos y los acuerdos de integración y cooperación que se intentan suscribir, donde se plantea expandir hacia la región la óptica militar venezolana: la Fuerza Armada concebida como una institución de carácter político y los militares en el rol de actores políticos. Otro objetivo de esta política oficial es conformar un contrapeso estratégico regional que se enfrente al enemigo, a Estados Unidos”.

En la política oficiosa actúan los organismos y personas vinculadas o simpatizantes del Gobierno que promueven y apoyan las ideas oficialistas. “Existe otra política, la de facto, que se ha venido desarrollando sin que se haya dicho que se hará. Es la que busca alterar el balance militar regional”, indicó Buttó durante su intervención en el foro que se realizó como parte del programa de la IV Semana Latinoamericana y Caribeña en la Simón.

De acuerdo con Buttó, la política de facto se manifiesta en la “sistemática compra de armamento” por parte del Gobierno venezolano, al punto de convertirse, en 2001 – 2013, en el principal comprador de armas de la Federación Rusa, con un estimado de 11 millardos de dólares invertidos, equivalente a 76 por ciento de todas las compras hechas por países de América Latina en ese período.

Buttó consideró que las armas adquiridas por Venezuela responden a una estrategia no defensiva, puesto que son del tipo que permite traspasar las fronteras propias. “Se han comprado, por ejemplo, helicópteros de combate, submarinos, fusiles para francotiradores, sistemas misilísticos, baterías antiaéreas. Esta estrategia persigue garantizar la supervivencia del proyecto político, por la vía de las armas, frente a potenciales amenazas. Además, le da capacidad al Estado venezolano para apoyar a aliados regionales, sean otros Estados u organizaciones enfrentadas a los Estados. Ya lo dijo Hugo Chávez: ‘No se sostiene un ejército con una estrategia defensiva’”.

Domingo Irwin, profesor jubilado de la Upel, también ponente del foro, dijo que el Estado cuartel o el Estado guarnición, mediante el cual se militariza a toda la sociedad, “aún no está implementado en Venezuela, porque si fuera así no estaríamos hablando en este foro”. Sin embargo, para el historiador “sí están establecidas las condiciones objetivas y legales que favorecerían la constitución de un Estado guarnición en Venezuela”.

Leopoldo Colmenares y Víctor Mijares, profesores de la USB, también participaron en el foro que contó con nutrida asistencia de estudiantes de Ciclo Básico. Las palabras de apertura de la actividad estuvieron a cargo del vicerrector académico, Rafael Escalona.