Trabajadores uesebistas fueron distinguidos con la Orden 18 de Julio por años de servicios
Las Autoridades Rectorales entregaron la Orden 18 de Julio a 286 trabajadores administrativos, docentes y obreros con 10, 15 y 20 años ininterrumpidos de servicio en la Universidad Simón Bolívar.
La Orden 18 de Julio “Creación de la Universidad” fue aprobada por el Consejo Directivo el 3 de julio de 1985 para “estimular y recompensar al personal administrativo, docente, técnico y obrero por méritos distinguidos por años de servicio”.
La condecoración correspondiente del año 2020 fue otorgada en Primera Clase (20 años de servicio) a 49 trabajadores, en Segunda Clase (15 años) a 74 trabajadores, y en Tercera Clase (10 años) a 17 trabajadores; la correspondiente del año 2021 fue otorgada en Primera Clase a 39 trabajadores, en Segunda Clase a 71 trabajadores, y en Tercera Clase a 37 trabajadores, de acuerdo con el listado de la Dirección de Gestión del Capital Humano.
Kayla Carreño, secretaria de Finanzas de Sutes quien habló en representación de los obreros, dijo que los trabajadores unidos con su sindicato seguirán apoyando con sus labores diarias al restablecimiento definitivo de la Universidad Simón Bolívar. “Claro está que nuestras luchas por la reivindicaciones de nuestros trabajadores continuarán, siendo el objetivo principal de la protección del salario y seguridad social de nuestros afiliados”.
Asimismo aprovechó la ocasión de pedir disculpas por los trastornos ocasionados a las actividades diarias de la institución, producto de las manifestaciones que se hicieron por el rechazo al instructivo impuesto por la Onapre.
En representación del personal administrativo, Margaly Gutiérrez dijo que está muy agradecida por el reconocimiento que se le ha hecho a ella y en esta ocasión a todos los premiados por sus aportes a la institución, frutos que a través de los años han venido alcanzando, de manera profesional y personal. “Este mérito hace que alcance una mayor trayectoria y que sea fuente de inspiración para los que deseen llegar a cumplir con esmero las metas que se propongan dentro de la USB”.
Terminó su exposición felicitando y agradeciendo a las autoridades, profesores, compañeros afiliados a Atausibo, obreros, y amigos, por el aporte invaluable que hacen a la universidad, y con mucho orgullo dijo: “Yo soy USB”.
Por su parte, el rector Jorge Stephany manifestó que, a pesar de que la universidad se ha mantenido con una presencialidad restringida, por decisión del Consejo Directivo, se dispuso un camino seguro al retorno a la normalidad, un camino que permite ir reconstituyendo los procesos dentro de la institución que de algún modo fue afectada con la pandemia y también los sucesos nacionales previos (el apagón, la situación de violencia urbana), y particularmente los problemas con los servicios que hicieron que la universidad aplicara horarios diferentes, todo esos acontecimientos hicieron que los procesos en la universidad dejaran de funcionar regularmente, de modo que se tuvo que apelar a medidas de emergencia para ir cumpliendo con las funciones necesarias y con el apoyo y el trabajo de los miembros de la comunidad, y así se logró mantener las actividades dentro de las medidas racionales.
Resaltó que el diseño implementado por el Consejo Directivo de cómo retornar a la normalidad está basado, principalmente, “en la confianza que se tiene en la institución y de la voluntad de los trabajadores en hacer su trabajo de seguir aportando para cumplir los fines de la universidad”, pero a pesar de que ha habido algún esporádico incentivo de parte de los supervisores para aumentar el volumen de trabajo que se requiere para cumplir la finalidad de la universidad, insiste que: “realmente el apoyo principal es el sentido común de los trabajadores la disposición y responsabilidad en sus funciones laborales.
Destacó especialmente el esfuerzo y sacrificio de los que han hecho su aporte y desea que también lleven el mensaje a todos los uesebistas, que es necesario regresar a la universidad, y que “es necesario hacer el trabajo, es necesario que nos demos cuenta que la Universidad Simón Bolívar no son los edificios, los laboratorios, o las aulas de clase, mucho menos los jardines, sino la universidad es la gente que está aquí, haciendo su trabajo, aportando, mejorando, buscando nuevas metas”.
El Rector puntualizó “la USB precisa crecer a pesar de que estamos en una etapa de contracción debemos pensar en la próxima etapa que va a ser de crecimiento y en esa etapa necesitamos a todos los uesebistas”.
Stephany concluyó felicitando y dándoles las gracias a todos los homenajeados y a todos los miembros de la comunidad universitaria, señalando que “la Universidad
Simón Bolívar debe aportar al país, porque Venezuela necesita universidades grandes, saludables, dispuestas a realizar el trabajo para la formación de los profesionales que el país solicita, para el desarrollo de las investigaciones científicas que requieren los problemas de la nación y para la implementación de esas soluciones en contacto con los sectores productivos del país”.
El acto se realizó en el Conjunto de Auditorios y fue presidido por el Rector (I) Jorge Stephany, el Vicerrector Académico (I) Victor Theoktisto, el Vicerrector Administrativo (I) José Vicente Hernández y el Secretario Cristián Puig, acompañados por la Directora de la Dirección de Gestión del Capital Humano, Willmary Medina, Leonardo Caraballo, presidente de Atausibo y del secretario de Sutes, Gabriel Mendoza.
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